viernes, 3 de agosto de 2012

PZ.39


Alcanzarlo, no es curar el deseo.

Alcanzarlo es vaciarlo. Y ahí descubrimos la calidad del deseo. . .

Los esenciales son infinitos, por lo tanto inacabados e inabarcables.


Avanzar, no siempre es hacia delante. Eso es sobre-avanzar: pisoteando, esquivando, saltando obstáculos.


El zig-zag supone quebrarnos el paso, dudar de la certeza en modo de pisar, obligarnos a incomodarnos en la postura de un paso quizás más largo, esforzándonos.


Crecer, es desmentirnos el ego, zigzagueando para ver lateralmente los “obstáculos”: tener una perspectiva.

Nadie aprende del éxito. . . .Ni de tener razón.

Tartamudos del miedo, el destino es un producto de factura diaria con vencimiento de hoy.

Sostener el tiempo, es hacer equilibrio con el vacio. Soltar el tiempo, es abandonarse en el ahora.
Algún día vamos a tener que animarnos a golpear la puerta de la careta social, y animarnos a que salga a atendernos nuestro verdadero yo.

Seremos capaces de decirnos “te amo y te acepto profundamente” en carne viva, sin careta?

 Somos resultado de nuestras acciones.

Accionamos según lo que sentimos.
Sentimos dictados por lo que pensamos.

Pensamos. . . según fuimos. . .quizás sea hora de nuevos cielos y nuevas tierras. . .

Génesis. . .nacer de nuevo: es concebirnos creadores del mundo. Nuestro mundo. . .acaso existe otro?

Ojalá nos encontremos co-creando en Lisboa.

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O u t t a k e : Agradecer y aceptar, dos llaves para destrabar todas las trabas. 

O u t t a k e II: Quien espera el momento ideal, idealiza al tiempo, lo viste de gala para una fiesta sin fecha. Si la cenicienta hubiera esperado que la carroza, el vestido y los zapatos fueran de su propiedad nunca hubiera ido a la fiesta, y jamás hubiera conocido al príncipe. Aceptar, agradecer y hacer la parte que nos toca: ACTUAR.









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